XIII
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LOS
ENANOS
-CONTENIDO EN ESTA SECCIÓN-
Los Enanos en la Historia
Enanos en las Fuentes
Etapas del dominio Enano
Antes de la Piedra
La Rabarnaka:
La Era de los Grandes Hirr'Masones
Variedades Raciales y Cultura
La Importancia de ser Enano
La Segunda Expansión
La asombrosa genética Enana
(Vs Humanos y elfos)
Enanos Occidentales
Enanos de Valhÿnnd
Enanos del Este
La Piedra y Primera Expansión
Enanos Klavkos
El Conglomerado Central
Los Enanos en la Historia
ENANOS EN LAS FUENTES
Los enanos también están ausentes de la mayor parte de los eventos mitológicos narrados en la Letanía, y, como los elfos, su inclusión está relacionada con las etapas temprananas de la Tradición (VER: CRONOLOGÍA, TRADICIÓN & FUENTES). Su aparición también resulta de inserciones posteriores en su propia versión de los orígenes de esta Tradición local enana.
Aunque las manifestaciones escritas de los elfos se consideran las primeras y son sus textos los que trascienden, lo cierto es que los enanos podrían haber desarrollado la escritura incluso antes que ellos. Se conservan placas conmemorativas y textos en piedra en un proto-Galénico que podría inducir a pensar que los enanos ya usaban recurrentemente una formula escrita avanzada cuando los elfos estaban desarrollando la suya. No obstante, esta escritura enana ya está relacionada con el "emerger de la Piedra", es decir, un periodo histórico temprano, pero en el que ya su cultura general, al menos esa cultura con la que hoy día se les relaciona, ya tiene configurados todos, o prácticamente todos sus elementos esenciales.
Antes de ello, existe un periodo oscuro en el que los enanos se conforman como tales, pero sin datos ni fuentes que puedan concretarlo más allá de sospechas y esbozos.
Las fuentes enanas existen desde muy antiguo y su gusto por conservarlas en piedra las vuelve duraderas, aunque limitadas en extensión. No obstante, al contrario que los elfos que mantuvieron imperios globales y cuya diplomacia y literatura se extendió y abarcó numerosos ámbitos y geografías, el secretismo enano sobre su documentación hace que no hayan salido de sus propios y herméticos círculos de saber. Quizá el día en el que los enanos en su conjunto decidan abrir sus archivos y compartir con el mundo sus secretos muchas de las especulaciones que sobre ellos y su pasado se mantienen hoy día sean por fin aclaradas.
Etapas del Dominio Enano
"La Piedra" es el concepto con el que los enanos definen su propia etapa de definición. Debe entenderse como un periodo tanto cronológico como cultural en el que todo lo que sucede acaba por definir al Enano tal cual es hoy día. No obstante, hay ecos que hacen sospechar de un recuerdo ancestral anterior a la "Piedra", un momento histórico y cultural en el que los enanos aún no están definidos con las particularidades que en teoría los hacen ser y parecer lo que son hoy día.
La única fuente para atisbar ese momento es el Tuh' Aavhar "El Viejo Camino" "El Viejo Sendero" (VER: RELIGIÓN Y DIOSES). El Tuh' Aavhar es hoy día un conjunto de mitos, tradiciones, rituales y esquemas que solo han podido surgir de un periodo anterior a la Piedra, en la que el enano estaba mucho más vinculado al nomadismo y a la conexión natural y espiritual. En él se intuyen prácticas que podríamos relacionar con el Shamanismo más primitivo. No es una corriente habitual entre los enanos pero han quedado muchas de estas prácticas y rituales fosilizados especialmente en algunos cuadros militares de las Cohortes más antiguas.
El Tuh' Aavhar nos invita a pensar en un origen nómada de los enanos más primitivos, apegados a un entorno cambiante, capaces de adaptarse y prosperar en una profunda conexión con lo natural y una potente base tribal en el que los "ancestros"; esto es, la generaciones anteriores de enanos, tienen una profunda veneración, importancia y culto.
En algún momento, el enano se sedentariza en algún lugar del Norte-Oeste del continente, posiblemente en entornos cavernarios (Encuentra la Piedra). A partir de ahí se define y cuando tiene el primer encuentro con otras razas y culturas (Los elfos, por ejemplo) ya parece contener muchas, si no todas las características físicas y culturales que hoy definen al enano.
ANTES DE LA PIEDRA
EL GÉNESIS ENANO
"Todo el mundo asume la versión de los Enanos: Mostal los condujo a la Piedra y allí les dió forma. Cuando los mostró al resto de los dioses, aquellos encolerizaron. Había creado una criaturas tan magníficas que ensombrecían a todas las demás creaciones del resto de Dioses. Así que le obligaron a equilibrar a sus criaturas. Mostal decidió cortarle las piernas a los Enanos.
Lo cierto es que, al margen del folklore, lo más relevante de ese mito está en su inicio: "Mostal condujo a los Enanos a la Piedra y allí les dió forma". La conciencia colectiva de los enanos asume firmemente que es "En la Piedra" donde toman su forma única. Y que es su líder divinizado (Mostal) quien los conduce ahí.
La pregunta más interesante que un historiador puede hacerse sobre este tema a partir de estos datos es... ¿Qué eran los enanos antes de la Piedra? Si fueron conducidos a ella... ¿de dónde venían?
Sólo el Tuh' Aavhar, el viejo sendero que practican algunos veteranos de guerra nos atisba una pista. Si los enanos no siempre estuvieron asentados en la piedra... ¿de dónde vinieron? ¿Cómo eran? ¿En qué creían? El Tuh' Aavhar dibuja una sociedad enana primitiva, nómada, cazadora y recolectora, que viaja siguiendo manadas de presas, que se adapta a estepas, bosques, praderas... y donde los ancestros, sus generaciones pasadas, quienes estuvieron antes que ellos e iniciaron el Camino, son el centro espiritual que cohesiona esas comunidades errantes."
CRONISTA -Crónica Alba-
LA PIEDRA Y PRIMERA EXPANSIÓN
Mostal conduce a los Enanos a la Piedra. Eso es lo que la Tradición cuenta. Con todos los datos a nuestra disposición, que no son muchos, las sospechas mejor fundadas nos permiten definir ese concepto algo misterioso que los enanos llaman "La Piedra" como un símbolo de su sedentarización, si damos crédito fundado a las sospechas inferidas del Tuh' Aavhar.
Probablemente los enanos se asentaron en entornos cavernarios y prosperaron allí. Es más que probable que fueran lugares con vetas de mineral expuestas que los enanos pronto aprendieron a extraer y utilizar. La necesidad de los enanos de extraer mineral cada vez más profundo les llevaría a crear entornos de ciudades-mina (prototipo ancestral de sus actuales Ciudades-Montaña) y a expandirse buscando nuevas localizaciones donde pudieran replicar este tipo de asentamiento. El conocimiento y desarrollo tecnológico del Enano en relación a la minería, la metalurgia y la forja es el que le da su entidad e identidad histórica. No obstante "la Piedra" no solo simboliza para los enanos la adaptación al medio minero y la adquisición de las habilidades y tecnologías que permiten el uso temprano del metal. También reconvierte por entero su cultura, abandonando las costumbres nómadas y la espiritualidad asociada a ella, asentándose y desarrollando un tipo muy concreto de asentamiento que van a buscar replicar a partir de entonces.
El mítico "emerger" de los enanos de las profundidades de la tierra y la expansión de sus Hirr'Masones (durante la cual se sospecha está el primer encuentro con los elfos) debería entenderse en ese periodo en el que los enanos mandan expediciones en la búsqueda de nuevas cavernas y vetas donde seguir asentándose.
Este periodo es aún muy temprano, pero el cambio cultural ya se ha producido. El Enano, al menos en las regiones del Oeste y Norte continental, jamás regresará al nomadismo y quedará para siempre apegado a la cultura de la mina y el metal.
MOSTAL
"El mito de que Mostal condujo a los Enanos a la Piedra podría tener un trasfondo histórico. Más allá de dudar de la existencia real de un personaje concreto que responda a ese nombre (los propios enanos consideran que Mostal tiene un origen "humano") podríamos decir que es la divinización del propio proceso de sedentarización y de aquellos líderes que lo propiciaron.
Lo importante de esta divinización es que los enanos romperán con sus antiguas tradiciones. Este peculiar monoteismo enano implica una nueva visión que ya no abandonarán. A partir de este momento, Mostal extiende su influencia a casi todos los aspectos en la vida de los Enanos, asumiendo protagonismo en todos ellos.
Así encontraremos versiones de Mostal para todos los oficios, a veces con otro nombre. La piedra es Mostal y Mostal es la Piedra... Y la Piedra no es otra cosa que el momento en el que los Enanos abandonan su tradiciones al sedentarizarse, para abrazar sin reparo las nuevas.
CRONISTA -Crónica Alba-
LA RABARNAKA
La Era de los Grandes Hirr'Masones
La Rabarnaka enana es el periodo de expansión de la cultura enana emergida de la Piedra y recibe el nombre del primer calendario conocido. Erróneamente, a veces, este periodo se conoce como el Imperio Enano, quizá por emulación a los imperios élficos y humano, pero es un grave error nombrarlo así porque no hay nada que pueda cimentar que los enanos en esta época pudieran tener algo ni por asomo cercano a la idea de Imperio. También se la conoce como la etapa de "Dominación Enana", pero tampoco hay evidencias de que los enanos dominaran nada o a nadie.
Lo que sí es, es un periodo de expansión; una expansión organizada y bien preparada con intención de colonizar nuevos territorios. Estas expediciones se organizaban en dos fases, una fase de exploración, y una fase de colonización y asentamiento. Las fases de exploración estaban compuestas por lo que hoy día consideraríamos "partidas de guerra" lideradas por un Mason o Hirr'Mason. El término Mason deriva del nombre de Mostal (Ma'asal, en su versión más antigua) y se ha querido ver en ello una emulación consciente de las atribuciones propias de la divinidad en estos líderes de clan. Es decir, los masones son investidos con esa idea de líderes de clan nómada, cuya premisa esencial es conducir a un grupo a salvo hasta un destino donde asentarse. Y esta era la principal tarea de estas figuras que se pertrechaban para viajes largos y peligrosos por tierra incógnita, por lo que andaban bien equipados para cualquier eventualidad o enfrentamiento armado. Esto acaba por devenir en una suerte de casta militar, una jefatura de clan que sin duda está en la base de la organización social de los propios enanos actuales, con los Harannies a la cabeza y con una preponderancia de lo militar en sus sociedades.
Esta necesidad de que cualquier enano pudiera ser convocado para una de estas partidas de exploración-colonización, y por lo tanto preparado para afrontar un conflicto armado con garantías, está en la base de la concepción guerrera presente en todo enano. Se dice que todo enano es un guerrero sin importar su oficio... y probablemente la idea deriva y ya está presente en esta época.
La Tradición cuenta que graves epidemias llevaron a los enanos de vuelta a la profundidad de la tierra. Mucho se ha especulado sobre si tales epidemias realmente existieron y si realmente obligaron a los enanos a refugiarse, deteniendo su expansión. Lo más probable es que simplemente los enanos dejaran de organizar tales expediciones o lo hicieran a un ritmo menor y más espaciado. Habida cuenta que sus asentamientos se enfocaban en la extracción, el control (y defensa) de los aledaños de esos asentamientos bastaba. El enano no necesitó una política de expansión territorial más agresiva como sí hicieron otras razas.. Esto pudo dar la impresión de una menor actividad global de los enanos dentro del contexto mundial, lo que está muy lejos de necesitar refugiarse. Una vez estos primeros asentamientos se convirtieron en verdaderas urbes y metrópolis, los enanos volvieron a tener una voz predominante en el escenario colectivo.
La Expansión Enana
"Una vez que los enanos encontraron la Piedra, buscaron la Veta" Así reza un viejo dicho Galeno y no puede tener más razón. Los enanos se tropiezan con la piedra y el metal casi a la vez. Se adapatan tan rápido que ya no pueden entenderse sin esas incorporaciones. Y claro está, cuando la veta se agotaba, buscaban otra.
A veces la veta más proxima está al lado, a veces en otro sector de la montaña. Hay ocasiones que hay que buscar nuevas montañas.
Al enano le interesa la veta, por eso no colonizó en superficie y extensión, como otras razas. Sus asentamientos son independientes unos de otros. No se deben nada y no compiten entre ellos, por lo tanto los recursos necesarios están concentrados y suelen ser fáciles de defender. Los enanos nunca fundaron un imperio porque no estaban interesados en ello, porque no lo necesitaban. Se procuraron el control de las mejores vetas, se hicieron con las mejores canteras. Las fuentes de la mejor piedra y el metal de mejor calidad fueron suyas. Ese era todo el dominio que necesitaban.
CRONISTA -Crónica Alba-
LA SEGUNDA EXPANSIÓN
Cada vez parece más claro para todos que los enanos nunca se marcharon, por lo que el nombre de este periodo ha ido progresivamente cambiando de la idea de un "re-surgir" de los enanos a una etapa de "segunda expansión."
Si entendemos que la Rabarnaka es, en esencia, la dispersión de los enanos en la búsqueda de fundar nuevos asentamientos, la Segunda Expansión es la etapa de consolación de todas esas nuevas fundaciones.
El periodo de "silencio histórico" entre ambas expansiones, esto es, el periodo "epidémico" en el que supuestamente los enanos volvieron a refugiarse bajo la tierra para huir de devastadoras epidemias que asolaron sus territorios, no es sino el tiempo necesario para que estas colonias mineras acabasen convertidas en lo que hoy día todo el mundo reconoce como la fórmula urbanística más característica y difundida de los enanos: Sus colosales Ciudades-Montaña.
La Ciudad-Montaña es el modelo de metrópoli enano. Son monstruosidades arquitectónicas sin paralelo, siempre asociadas en origen a vetas de mineral o piedra, que fueron expandiéndose en superficie y altura sobre la montaña hasta hacerla desaparecer, en ocasiones. Tienen amplios niveles en tanto en superficie como en profundidad. Las Ciudades-Montaña son a su vez Ciudades-Estado independientes unas de otras, conformando en torno a ellas núcleos territoriales que dominan valles, ríos, costas y asentamientos en superficie. Todo el universo enano orbita en torno a estos colosos arquitectónicos, a cuyo frente suele estar un Haram ( a todos los efectos, la figura de un rey militar). Si en la expansión del área de control se llegan a fundar nuevas Ciudades-Montaña, éstas se consideran independientes, con sus propios Haranies, aunque mantienen lazos preferentes con la metrópoli, cuyo Haram promociona automáticamente al rango de Hirr'Haram, que tiene categoría de "primus inter pares".
Así se constituye el modelo de "reino enano" que llega a la actualidad.
Aunque las Ciudades-Montaña son auténticos termiteros concebidos autosuficientes, en esta etapa los enanos comenzarán a desarrollar una próspera actividad comercial por la que también son hoy día muy reconocidos. Y no será tanto porque su cultura precise necesariamente de productos y materiales fuera de su área de control, si no porque el resto del mundo demande sus minerales, metales, piedra y manufacturas.
La gran habilidad de los enanos en sus etapas precedentes fue la de asentarse en los enclaves más ricos para su producción minera y metalúrgica y hacer de dichos enclaves bastiones inexpugnables, en un momento en el que los elfos prefirieron centrarse en un dominio extensivo de sus áreas de influencia bajo un control jerárquico centralizado, es decir, constituirse como un imperio unificado. Mientras los elfos se peleaban entre sí por su propia supremacía, los enanos se asentaron estratégicamente conformando ricos y prósperos núcleos autosuficientes e independientes entre sí, altamente militarizados y organizados a un nivel que haría sonrrojar a las hormigas. Y lo hicieron sin llamar la atención.
Cuando el resto de las civilizaciones creció lo bastante como para necesitar suministros más allá de sus propias áreas de control encontraron que los enanos ya estaban allí. No tuvieron más opción que quedarse con las sobras, o negociar sus excedentes. Tratar de arrebatar a los enanos su territorio por la fuerza se ha demostrado históricamente ser una manera rápida y contundente de desaparecer del mapa.
Esta es la razón por la que en esta etapa los enanos parecen "regresar" al escenario mundial, pero lo cierto es que probablemente nunca se fueron. Es el resto del mundo, necesitando nuevas fuentes de suministro acorde con sus nuevas necesidades, el que toma conciencia de que los enanos están ahí.
Es obvio que el primer intento de las potencias, especialmente elfas, fue buscar en primera instancia la manera de arrebatar por la fuerza algunos de estos enclaves. Todos esos intentos se saldaron con rotundas victorias de los hijos de Mostal. El enano rara vez hace la guerra fuera de sus territorios, entre otras cosas porque no lo necesitan, pero en ellos son prácticamente invencibles. Es un pueblo defensor a ultranza, que ha hecho de esta defensa y del combate un pilar ancestral de su sociedad. Pueden poner sobre el campo de batalla cantidades absurdas de efectivos, todos ellos con formación de combate profesional. Son duros, leales, altamente organizados y disciplinados en la batalla, tienen una legendaria resistencia a la magia (cosa que los elfos aprendieron por las malas), dentro de sus fronteras están completamente arropados y abastecidos por toda la maquinaria productiva de sus ciudades enjambre... y si todo falla, se pueden retirar tras las docenas de líneas de muralla de sus ciudades. En el muy improbable caso de que estas cayeran, les quedan los niveles subterráneos.
No hay que molestar a los enanos, es algo que el mundo comprendió pronto.
Siendo esto así... la pregunta que muchos hacen es la siguiente... ¿Por qué los enanos no conquistan el mundo? ¿podrían hacerlo de querer?
Lo cierto es que aún cuando las tácticas de combate enanas son muy agresivas, (sus cargas de Ariete son devastadoras) su concepto de guerra es defensivo, por lo que una guerra de expansión no les conviene... pero la probable respuesta a la pregunta (y esto es lo que a los elfos ha preocupado y enfurecido siempre de los enanos) es: sí, podrían... pero no quieren. Simplemente, no lo necesitan.
Las Ciudades-Montaña
"No hay nada que llegue a acercarse ni de lejos a una Ciudad-Montaña enana.
Son, literalmente, ciudades-montaña o si se prefiere, Montañas-Ciudad.
Todo hace pensar que el origen de estos alardes arquitectónicos tuvo humildes principios: por lo general, un asentamiento básico para la extracción de mineral en veta de superficie o poco profunda. Los enanos se destaparon muy pronto como expertos prospectores y supieron encontrar los lugares más idóneos, no solo para excavar, también para asentarse. Lo hacían cerca de manantiales subterráneos o ríos fluyentes que tuvieran zona de bosque cercana, proxima a valles donde extender tierras de labor. El enano miraba a futuro a la hora de elegir el emplazamiento de su asentamiento. Tenía claro que crecería ¡y vaya si lo hacía!
Conforme la veta o la cantera iba siendo devastada se iban añadiendo en sus huecos estructuras, tanto en superficie, adosadas a la ladera expuesta, como al interior, reutilizando galerías no funcionales a las que se dotaba de cuantos espacios fueran necesarios y nuevas funciones. Literalmente la Ciudad acaba devorando a la montaña, en el exterior y en el interior. De la misma manera que las ciudades elfas se fusionan con el bosque y lo integran, los enanos hacen lo mismo con la montaña y la piedra.
Han hecho falta siglos, si no milenios, para que las Ciudades-Montaña más antiguas alcanzaran el aspecto y dimensiones que tienen hoy día. La mayor parte de ellas han perdido toda la veta, ya no hay mineral, metal o piedra que extraer, pero se han convertido en los centros neurálgicos de la actividad enana de la zona, en la que se fundaban nuevos asentamientos, los cuales acababan convertidos en nuevas Ciudades-Montaña o están en fase de hacerlo.
Las más grandes de ellas resultan de la suma de varios de estos enclaves, en origen distantes, aunque relativamente próximos como para acabar fusionándose en una gigantesca megaestructura.
El Dhûm’Amarhna es la suma de hasta cinco antiguas Ciudades-Montaña y se coloca a la cabeza de toda urbe conocida, con sus más de ocho millones de habitantes. En la lista de las diez ciudades más grandes y pobladas del mundo conocido, las diez son Ciudades-Montaña. Sÿr'Shaldannessär, la fastuosa capital Boreal de lo Ürull con unos 2.8 millones de habitantes es la primera ciudad no enana de la lista y ocupa el puesto diecinueve. La solemne Capital Imperial se tiene que conformar con el puesto treinta y dos. Basta el dato para hacrse a la idea del tamaño colosal de estas estructuras enanas.
Las Ciudades-Montaña crecen hacia adentro y hacia afuera, pero en contra del extendido mito, el enano prefiere vivir con el cielo y el sol sobre su cabeza, por lo que las zonas exteriores está mucho más valoradas. La vida de la ciudad se hace hacia afuera, en sus múltiples terrazas en altura y en los extensísismos arrabales extramuros.
Los niveles subterráneos están adaptados para la habitabilidad pero la mayor parte de ellos están cerrados, cegados a modo de búnker como medida desesperada ante una necesidad de emergencia. Los que están abiertos contienen en su mayoría zonas de almacén, sedes de gremios mineros, mucha de la maquinaria necesaria para hacer habitables los subterráneos, archivos, y si la ciudad aún tiene veta (o la tuvo), zonas urbanas, pero estas están consideradas los verdaderos barrios bajos.
Nadie quiere vivir bajo la tierra si puede hacerlo en el exterior."
CRONISTA -Crónica Alba-
La Asombrosa Genética de los Enanos
(Vs Humanos y Elfos)
El rasgo más característico de un enano, aquello por lo que es facilmente identificable frente al resto de razas no es su estatura. El margen de diferencia en la estatura media entre enanos y humanos es solo de unos diez centímetros. La diferencia entre un enano alto junto a un humano pequeño es casi inapreciable. Sin embargo, un humano en su media y un enano en la suya pueden diferir en más de 20 kilos de peso a favor del enano. El rasgo más distintivo es su corpulencia y definición muscular. Los enanos son notablemente más robustos y por lo tanto pesados que los humanos. La diferencia entre sus diámetros y definición de torsos, brazos o piernas no deja lugar a la duda. La corpulencia que un enano tiene de manera natural es inalcanzable para un humano sin un régimen de ejercicio la mayor parte de las veces, fuera de su alcance. Es precisamente esta densidad muscular la que junto a su ligera menor estatura les hace parecer mucho más pequeños de lo que en realidad son. Caso aparte es la casta de los enanos Titanes, que tienen medias absolutamente humanas. Por tamaño, no son diferenciables de estos.
La barba es otro rasgo distintivo en los varones. Es cierto que su textura es más voluminosa y recia que la humana, pero es más un rasgo cultural que una diferencia genética. Para el enano la barba es símbolo de la madurez masculina y lo diferencia del niño, por lo que lo común es que suelan lucirlas, cuanto más largas mejor. La tendencia a trenzarlas y decorarlas es una cuestión cultural, asociada a la guerra. El enano se trenza la barba para la guerra, por lo que presentar barbas trenzadas suele ser símbolo de esta casta.
El enano presenta mayor dimorfismo sexual en general que los humanos. Las mujeres enanas, lejos de los estereotipos (normalmente de origen élfico) que las presentan básicamente idénticas a sus varones, es cierto que por lo general tienen físicos mucho mas tonificados que sus homónimas humanas, pero la diferencia con la musculatura y el aspecto general con respecto a los varones es notable. La diferencia de una mujer humana en su media con una enana suele ser entre 6 a 8 kilos a favor de la enana. Tienen cuerpos más compactos y definidos, pero cualquier enana en su juventud podría competir con una humana o elfa en cuanto a proporción y belleza general.
Muchos enanos presentan un rasgo aleatorio, no asociado con ninguna variante racial y que no se da en todos los casos: las oerjas puntiagudas. Cuando lo hacen suelen ser mas cortas y redondeadas que las de los elfos. Hay por ahí una teoría, negada por ambas partes, que asegura que en algún momento del pasado existió un cruce puntual entre ambas razas que ha legado el rasgo élfico, que se presenta aleatorio en los enanos. Esto no exime a que los enanos sigan refiriéndose a los elfos de manera burlesca como los "orejas de punta".
Los Enanos Titanes
Los Titanes son una rareza, una anomalía con respecto a la tendencia general de la raza sin que exista a priori ninguna explicación clara para explicarlo.
Resultan enanos con medias de estatura humana sin perder ningún otro rasgo esencial de la raza. Mientras que resulta poco habitual que un enano supere el 1'70 cms, lo extraño es que un titán baje hasta esa cifra. Estas medias también incluyen a las mujeres.
Esta ponderación de la estatura media es un rasgo exclusivo de los Titanes que suele desaparecer cuando se mezclan con otras razas.
Dicen descender de Titán, un Hirr'Mason legendario, el enano más alto jamás conocido, que dicen que alcanzaba los dos metros de estatura. Hay que puntualizar que aunque quizá haya una verdad escondida, la existencia de Titán como personaje historico sostiene muchas dudas y lagunas.
VARIEDADES RACIALES
En los Enanos se observan también todas las grandes variantes de pigmentación de piel y rasgos raciales adaptativos presentes habitualmente en los humanos. La alta movilidad enana ha acabado creando un enorme grupo central que mezcla muchos de los rasgos que se suponen característicos de los troncos principales, dando lugar a un centenar de subdivisiones y "familias o ramas genéticas". Solo los segmentos más aislados en sus entornos guardan rasgos étnicos claros.
La mayor parte de los enanos se ha mezclado mucho y, con honestidad, no presentan rasgos raciales claramente identificativos de uno de los tres grandes Troncos, que serían: El gran tronco Galeno, el Nord-Galeno y el proto-Galeno (o sub-Galeno) a los que se añade la llamada "Variante de los pueblos del Mar".
No se tiene claro cual es el tronco principal, si es que alguno existe. Las teorías más punteras hablan de que no existe un tronco único y que, de haberlo, estaría en un punto muy indeterminado entre en centro y el sur continental, pero no se tienen certezas. Es por esto que la guía se establece en el Galeno, el idioma rúnico-pictórico que parece estar en la base de la mayor parte de las variantes linguísticas de los enanos. Siguiendo las pautas de evolución de los idiomas basados en el Galeno en conjunto y apoyados en ciertos patrones de rasgos físicos, se han trazado simulaciones de "rutas de emigración" de tales rasgos que podrían haber dado lugar a ciertas familias emparentadas. Pero esto es solo una guía, una ayuda para entender el vasto abanico de flujos que pudieron dar lugar a las centenares de variantes y mezclas que presenta el mundo enano.
LOS ENANOS OCCIDENTALES
-El Gran Tronco Lingüístico del Galeno-
El "gran tronco" del Galeno corresponde a docenas de familias lingüisticamente emparentadas que al día de hoy suponen la población más numerosa y, por lo tanto, más representativa de enanos. Es por esta cuestión de número que los enanos occidentales estén considerados el prototipo, el canon reconocible de lo que es un enano y su cultura.
Se sitúan geográficamente en todos los accidentes montañosos de relevancia del norte-oeste del Arminia, desde las estribaciones norteñas del Macizo del Belgarar hasta cubrir dos tercios de la Espina del Ycter, concentrándose especialmente en el gran tronco del Galeno-Amarhno y el núcleo Ausveqo-Tuhsêk. Esta cultura tiene penetraciones hacia las montañas del centro continental por encima del Cinturón de Arminia, y en la helada península del Ycter hacia las prolongaciones de la Espina y sus macizos centrales, aunque las castas en estos sectores de intersección presentan mucha mezcla con los troncos Nord-Galeno en el norte, y ramificaciones híbridas del sub-Galeno en el vasto conglomerado central.
Aparte de su actual hegemonía demográfica, el gran tronco Galeno presenta también el más avanzado nivel tecnológico tanto social como militar (basado en cohortes) y urbanístico (con su modelo de Ciudad-Montaña). Esta es otra de las razones por las que sirven de referencia. Da la sensación que los grupos enanos que se asentaron en esta zona geográfica y que compartían el Galeno primitivo como base lingüistica son los que mayor éxito de desarrollo cosecharon, y que, su periodo de expansión llevó su cultura y su base idiomática a puntos más septemtrionales en el norte y hacia el centro-este continental.
Su aspecto físico queda también como la base racial de referencia, pero existen muchos indicios de que sus rasgos son ya fruto de abundante mezcla, por lo que no pueden ser el tronco originario, genéticamente hablando.
Los enanos más representativos de esta variante racial y cultural son los integrantes del gran Tronco Galeno-Amarhno, concentrados en el populoso reino del Dhûm'Amarhna en las cordilleras y valles del Ghâr'al'Amarnha. La sub-rama más importante es la Ausveqa-Tuhsêkii situada a su norte, que presenta diferencias culturales pero no raciales, alcanzando territorialmente el primer tercio de La Espina del Ycter, ya en la península del Ycter-Nevada. Este gran tronco puede contener más de una docena de identidades tribales principales y casi medio centenar de identidades menores, fenómeno consecuencia de la política de colonización independiente que siempre han llevado a cabo los enanos, pero desde el punto de vista de rasgos raciales comparten todas las características generales.
Suelen presentar una variedad de pigmentación en la piel bronceada que oscila en intensidad pero que nunca llega a ser pálida, como es habitual en el tronco Nord-Galeno, ni completamente oscura como en las ramas del Sub-Galeno. Sus cabellos pueden presentar tonalidaes muy variadas desde el negro al castaño claro, incluyendo en cabello azafranado y rojizo; que pueden estar presentes, pero no son habituales. Lo normal es que presenten tonalidades castañas en todo su amplio abanico. La tonalidad en los ojos es múltiple, incluido los tonos ambarinos y rojizos, sin que exista una tendencia clara.
Culturalmente parece probado que son los grupos occidentales los que definieron el modelo de Ciudad-Montaña, ya que el grupo de mayor antigüedad de este modelo se concentra en sus espacios geográficos, siendo considerado el Dhûm'Amarnha la más antigua de todas y bien podría ser el foco emisor de este prototipo de asentamiento.
El Galeno
"Junto con el modelo arquitectónico de Ciudad-Montaña, que parte de un modelo básico de asentamiento extractor y que va creciendo con el tiempo y las necesidades, el otro gran aporte de las migraciones galenas es el propio idioma, El Galeno.
El Galeno es el primer idioma en ser escrito, en adoptar forma escrita. Tanto es así que aún cuando los elfos lo niegan, puede que se inspirasen en él o al menos en su concepción escrita para desarrollar su propia escritura. Esto nace de la evidencia de que ambas fórmulas de escritura son pictóricas y no silábicas. Los idiomas elfos poco a poco irán desarrollando un sistema silábico, aunque perdure en ellos cierta resonancia pictórica. El Galeno y sus sucesores, no. Nunca perderán el componente pictográfico, lo que los hace idiomas muy complejos de dominar en profundidad en su formulación escrita.
La complejidad de un idioma pictográfico y en concreto del Galeno es que al basarse en runas que simbolizan conceptos globales, la interpretación del mensaje depende de cómo estén conectadas esas runas y del valor simbólico de cada una de ellas por separado y en conjunto el lector interprete.
Todas las runas tienen más de un valor interpretativo y adquieren nuevos valores interpretativos dependiendo de con qué otras runas se vinculen. La runa Ghâr, por ejemplo, representa una montaña y literalmente significa "montaña" pero los galenos la usan para para simbolizar el "hogar".
Ghâr acompañada de la runa âl, que indica pertenencia o propiedad, y la runa propia de identidad (Tuh - Aasak) debería entenderse como "La montaña/hogar de Tuh'Aasak (de los Tuhsêkii).
Algunas asociaciones de runas pueden dar lugar a nuevas runas que adquieren nuevos significados, quizá solo para un conjunto o grupo concreto (así es como el Galeno evoluciona a sus derivados). El concepto Tuh'Aasak, por ejemplo, puede representarse con sus dos runas por separado: T'uh, que señala algo antiguo, ancestral y A'asak, que simboliza una maza, un garrote, un arma de guerra (pero no un hacha, que se simboliza con la runa Arü y lleva a otras connotaciones)
Si se hace de esta manera el concepto puede entenderse de forma literal: Las amtiguas mazas, las armas ancestrales...
pero esas runas pueden "vincularse" con unos grafos de unión. En ese caso, debería entenderse como Tuh'Aasak y estaría refiriendo a un lugar geográfico: La montaña del Aasak, esté o no presente la runa Ghâr.
Pero también se pueden "fusionarse" en una nueva runa (Tahsak) que adquiere los valores gráficos de ambas y además añade un nuevo nivel de lectura: (el pueblo de los Tuhsekii), pero para los tuhsekii y solo para ellos, Tahsak tiene el valor de "vínculo de hermandad /hermano".
Y esto es solo el principio. El complejo y rico universo que abre el Galeno quizá esté en su conjunto fuera del alcance de todo aquel que no haya nacido en esta cultura.
El Galeno pasa por muchas fases de desarrollo, como ocurre con todos los idiomas, desde un pre-Galeno y proto-Galeno a un Galeno Temprano, un Galeno pleno o clásico hasta sus múltiples variantes que toman el Galeno como base.
Así, no sin las dificultades obvias, puede hacerse un seguimiento de las oleadas de expansión demográfica de los pueblos del Tronco Galeno simplemente siguiendo los ecos y variantes producidas en el idioma."
CRONISTA -Crónica Alba-
LOS ENANOS DE VALHYND
El Tronco Nord-Galeno
La variante Nord-Galena, asentada en el extremo norte de la península del Ycter resulta la primer gran ramificación del Gran Tronco Galeno, aunque esto presenta aún hoy día controversia. Culturalmente no presentan grandes diferencias con los enanos del tronco Galeno. Sí lo hacen en cuanto a aspecto físico general y variante de idioma.
En el primer caso, los aspectos físicos más destacables es un notable cambio de pigmentación en cabellos y piel, que se aclaran. Sus pieles son visiblemente más pálidas y sus cabellos abarcan el abanico del rubio, aunque no es extraña la coloración castaña clara ni las gamas de rojo. La tendencia de sus iris suele ser clara, pero no es una norma.
El segundo aspecto es el que ofrece la excusa para la controversia. Los clanes del norte hablan una variedad de Galeno propia con muchas similitudes con el tronco común del que se considera Galeno Temprano. Así, la duda es... ¿Son los Nord-Gelénicos una escisión temprana de grupos del Gran Tronco que alcanzaron pronto el extremo norte? ¿O resultó justo al contrario? Y lo que hoy denominameos el Gran Tronco Galénico en realidad es el resultado de las expediciones tempranas hacia el sur de un foco originario en el extremo norte. Hay dudas razonables para aceptar plenamente ambas teorías. Si se considera la primera opción como la comunmente aceptada no ha sido porque tenga suficiente respaldo de fuentes o hechos que la demuestren, sino por convencionalismo; quizá, por concesión a la preeminencia cultural de los occidentales. No se tienen datos suficientes como para determinarlo a partir de las huellas en el idioma. Hablamos de un Galeno tan incipiente que bien pudo evolucionar en cualquiera de las dos direcciones.
La datación de las Ciudades-Montaña de ambos grupos es relativamente similar sin que haya datos firmes que puedan corroborar cuales de ellas son realmente las más antiguas; por lo que el flujo migratorio norte-occidente sigue siendo factible en ambas direcciones. Sea cual sea su dirección, lo que sí parece un hecho es que estos grupos raciales están íntimamente emparentados y que uno es el resultado del otro. Hay que decir que este dilema solo preocupa a los historiadores y que a los enanos parece importales bien poco quién fue el primero.
Existe un grupo intermedio que presenta progresivamente rasgos propios de ambos troncos, que se ha venido a llamar "la Rama de penetración Galena" encuadrados en los segmentos superiores de la Espina de Ycter y sus macizos centrales, constatable desde el territorio de los Hallaqii.
El Gran Conglomerado Central
El Conglomerado Central es también conocido como "segunda rama de penetración Galena" y abarca a más de un centenar de identidades, tribus y ramas asentadas en los accidentes montañosos del centro de Arminia, a uno y otro lado del Cinturón. Su rasgo más característico es la enorme diversidad y mezcla de influencias que presenta. Se le denominó en primera instancia "segunda rama de penetración Galena" porque se creía fruto exclusivo de la expansión Galena desde el occidente hacia el oriente, sucedida tras la penetración hacia el norte o en simultaneo a ella.
Parece claro que tal penetración existió y que grupos galenos del oeste incursionaron y se asentaron progresivamente de oeste a este del continente, pero la realidad ha demostrado ser más compleja.
Porque también se detecta un flujo migratorio de sur a centro de pueblos que no usaban el Galeno y que no traían consigo la cultura desarrollada en el oeste, que también tuvo su propio desarrollo local allí.
Esto produjo una base poblacional ya con características definidas a las que las oleadas migratorias galenas de oeste se sumaron. Esto conformaría un enorme grupo de mezcla que daría lugar a pueblos que adaptarían todas, parte o ninguna de las características propias de los galenos.
Si hemos de entender que las claves para reconocer un asentamiento compuesto por Galenos occidentales puro o con un alto porcentaje de su influencia directa son, por un lado aparición de asentamientos basados en el modelo de Ciudad-Montaña, el uso del Galeno o un derivado directo de este, y la estructuración militar basada en el modelo de Cohorte, aquí vamos a encontrar una inmensa mayoría de grupos que van a adoptar unas influencias y otras no. Esto nos lleva a pensar que los grupos galenos no encontraron estos lugares vacíos, como sí ocurrió en su supuesta expansión hacia el norte, sino que aquí, en numerosas ocasiones, entrarían en contacto con otros enanos que ya presentaban sus propias influencias. El tipo de influencia y las características físicas de esos otros grupos enanos solo apuntan a una dirección: grupos migratorios provenientes del sur.
Físicamente los pueblos e identidades enanas del Gran Conglomerado presentan un rico muestrario de tonalidades de piel fruto de una evidente mezcla, más o menos predominante, de Klavkos y Galenos. En esencia su pigmentación suele ser ser, por lo general, más oscura que la galena y algo más clara que los Klavkos; encontrándose en los extremos pigmentaciones propias de ambos. El color de sus cabellos es predominantemente oscuro y solo aquellas tribus con fuerte impronta de mezcla galena adquieren además tonos castaño arcilla y similares.
Culturalmente hablamos de un abanico muy amplio con sub-ramas propiamente galenas o muy influenciados por ellos (como la subrama de Bongos-Tyrittas) sub-ramas que adoptan asentamientos del tipo ciudad montaña, pero no sobre veta, por lo que no crecen como lo hacen en el occidente y la disciplina de la formación en Cohorte (como la subrama Tarqo-Unega) cuyo idioma no impronta rasgos del Galeno o las sub-ramas Nammita-Qarsitta, que adoptan el Galeno pero mantienen tradiciones seminómadas.
La Cohorte y el Arünnah
"La estructuración militar en Cohorte está fosilizando, en el ámbito purtamente militar, lo que en origen era una organización social y civil; una estructura concebida desde la cohesión, movil y versátil, capaz de enfrentarse y salir victoriosa de cualquier eventualidad, en la que cada miembro tiene un rol definido, responde a él y trabaja en equipo.
Esta estructura ya se observa en las partidas exploradoras de la época de los Hirr'masones pero, con toda seguridad, no solo es anterior a ella, sino a la propia Piedra: No es sino el eco de la estructura nómada primigenia que les condujo a la Piedra.
Se sostiene en una curiosa y delicadamente equilibrada mezcla entre jerarquía piramidad t concepción horizontal, donde un líder único, el Masón (El Haram cuando se trata de ejército) tiene toda la autoridad, mando y última palabra, asistido por un grupo de oficiales, pero que es elegido por consenso de las filas (es decir, la comunidad)
El refrendo de las filas, es decir, el consenso del grupo, es el que valida la disposición y propuestas del Haram.
La mayor responsabilidad y objetivo de un Mason/Haram es la supervivencia del grupo y esto se aplica en el plano militar. El enano no gana las batallas por número, sino por alarde de técnica, inteligencia, ferocidad y disciplina. Perder hombres no es una opción. La integridad de la cohorte es sagrada y esa premisa es heredera de la etapa de exploración que, a su vez, lo es de la fase nómada; unas etapas en las que perder integrantes suponía pérdidas irreparables.
Así, emulando aquellas estructuras nómadas que permitían y garantizaban la supervivencia en largos y peligrosos viajes, con un líder firme que debía primar por encima de todo la seguridad del grupo, elegido y respetado por ese mismo grupo, que refrenda y valida la actuación de ese lider y que puede deponerlo si no cumple los objetivos, se asiste a la creación de segmentos militares que se organizan y estructuran con esos mismos principios en la guerra.
Lo más importante en una cohorte no es en si mismo la estructura, jerarquía de mando, o disciplina, sino los vínculos creados entre todas sus partes; vínculos de lealtad, protección y asistencia de grupo. Cada cohorte es, en sí misma, un clan, una tribu, una familia, una comunidad. Son esos vínculos de respeto, lealtad y cuidado los que los vuelven tan letales en batalla y tan admirables fuera de ella.
Al ser una estructura heredera directa de las antiguas etapas y modo de vida nómada no es extraño que a pesar de que la espiritualidad enana se conforma a partir de la llegada a la Piedra (el peculiar monoteismo basado en la figura referente de Mostal) haya sido precisamente en el contexto militar de las cohortes donde el Viejo Sendero, esto es, los ecos de la primitiva espiritualidad shamánica nómada haya pervivido con mayor fuerza."
CRONISTA -Crónica Alba-
LOS ENANOS KLAVKOS
El Tronco Sub-Galénico
El término Klavko es un genérico no-peyorativo usado por los enanos de cultura galénica para referirse a sus congeneres del extremo sur y que responden a las características anatómicas de su raza negra. Klavko no tiene una traducción directa que exprese con honestidad y exactitud lo que ese concepto transmite. Los galenos lo usan para referirse a grupos que "no encontraron la Piedra", es decir, grupos que mantienen las tradiciones nómadas o seminómadas que se les atribuyen en la antigüedad.
El término más acertado sería el de "prehistórico" si eliminamos de él el matiz que puede dejar entenderlo como sinónimo de sub-desarrollado y solo lo entendemos solo como "periodo anterior a la escritura" (en este caso, anterior a la Piedra). Los galénicos no tienen una mirada de superioridad frente a estos pueblos ajenos a la Piedra, de hecho la mirada hacia ellos es de profundo respeto. Los galénicos (y con ellos la práctica totalidad de enanos) se reconocen de algún modo en la tribus nómadas, tienen el recuerdo ancestral de que una vez todos lo fueron, sean o no seguidores del Viejo Camino. A pesar de que los enanos en su conjunto tienen fama inmerecida de tercos y reaccionarios, lo cierto es que pocas civilizaciones resultan más abiertas, tolerantes e integradoras que los enanos; pocas entienden tan bien como ellos lo hacen que la diversidad no es grieta, sino riqueza. Existe un dicho Tuhsêk que representa muy bien esta actitud: "Donde veas una barba (de enano), estás viendo a un hermano."
En este sentido, los Klavkos representan un modo de vida alternativo a la Piedra, anterior a la Piedra, en el que ningún otro enano ha visto amenaza o peligro. Controlan la mayor parte de grandes estepas, sabanas y bosques húmedos del Nhamibia, y grandes extensiones de praderas y estepas del centro oeste y sur continental por debajo del Cinturón. Sus modos de vida oscilan entre los nómadas puros, cazadores recolectores perseguidores de grandes manadas de hervíboros; el seminomadismo ganadero o nomadismo estacional al mando de grandes rebaños y el semisedentario, con núcleos poblacionales estables que sirven de centros de referencia para la actividad nomada estacionaria. Siguen practicando una espiritualidad basada en el Shamanismo y el Culto a los Ancestros. No reclaman para sí ningún reino y viven en una armonía con la naturaleza que sonrojaría a la mayor parte de los elfos. Su estructura social se basa en la fórmula más primitiva de la cohorte, probablemente el modelo del que esta originalmente deriva. Muchas de estas características se encuentran presentes en identidades tribales del Gran Conglomerado central e incluso en algunas líneas de enanos del este.
Siendo esto así, cabe preguntarse si no son los pueblos Klavkos los núcleos originarios de donde partieron las tribus nómadas que encontrarían la Piedra. Expediciones que cruzaron el Cinturón y alcanzaron el oeste, previo diseminarse por el centro continental. En su camino desarrollarían las bases del proto-Galeno e incluso podrían haber sido ellos quienes se tropezaran originalmente con los elfos.
Lo cierto es que hay muy sólida base para pensar en esa posible realidad, pero ninguna certeza de que lo fuera. No obstante, existe una teoría unificadora que basa toda su formulación en un hecho comprobable que podría darle la suficiente consistencia y que, en cierta medida, le está haciendo ganar muchos adeptos. La base argumental es el hecho constatable de que ningún Klavko presenta la variante "orejas de punta". Si la responsable de este rasgo es una puntual mezcla con elfos, los Klavkos suponen una versión anterior de enanos, es decir, un genoma ancestral que daría la base para pensar en un ciclo migratorio que llevara a las tribus del sur a instalarse en la Piedra en el occidente y, desde ahí, viajar al norte y al este donde volverían a tropezarse con los grupos rezagados que quedaron en el centro continental, conformando el gran conglomerado.
La réplica se encuentra en el señalamiento de que los Klavkos ya presentan la densidad muscular y el recorte de altura propio de la raza y que hoy se explica como consecuencia de la adaptación al medio minero propio de la Piedra. Es obvio que algo se está escapando y que alguna de las bases argumentales es errónea, pero hasta que algún dato nos permita descartar una opción o clarificar el panorama, las tribus de enanos Klavkos seguirán representando, incluso para los propios enanos la visión más cercana a su propio y primitivo origen ancestral.
LOS ENANOS DEL ESTE
-Los Pueblos del Mar-
Quizá la sub-rama más peculiar de enanos sea la considerada "oriental".
La mayor parte de las identidades asentadas en el lado oriental del continente son, o bien migraciones y fundaciones directas de Galenos en diversos momentos de la historia o incursiones de ramas del Conglomerado que lentamente se han desplazado hasta los extremos orientales. Allí han constuido unas poblaciones híbridas que replican adaptaciones locales de los modelos de Ciudad-Montaña a escala inferior de las levantadas en occidente (por ser mucho más modernas, en su mayoría), bien los modelos híbridos frecuentes en el Conglomerado o, sencillamente, se han instalado en ciudades directamente de fundación humana. El núcleo de estas poblaciones suele partir de iniciativas comerciales muy modernas, comparativamente hablando, lo que lleva a la falsa confusión de que los enanos "orientales" son básicamente potentados mercaderes. Y es cierto que en su mayoría lo son, lo que no son es un grupo tribal cultural y físicamente originario de estas latitudes. Son en su mayoría enanos de origen Galeno o nord-central asentados allí. Enanos emigrados en épocas muy recientes.
No obstante, sí existe un grupo racial oriundo del este continental que sí presenta connotaciones propias, solo que es muy escaso. Su mayor presencia está en las islas del Ülsadar y sus mejores representantes son las tribus de Yulos y Rurkos. Hay presencia de identidades similares a lo largo de las costas del Brazo del Armín y todo el litoral oriental del continente, pero a escala muy reducida si se los compara con los enanos de origen Galeno.
Su procedencia (no podía ser para menos) no está clara, pero se sospecha de un origen migratorio hacia el este de grupos del conglomerado parcialmente aculturados por los Galenos que inicialmente se instalarían en diversos puntos del litoral este continental. Allí desarrollarían su vínculo con el mar que acabaría llevando a parte de esta población a lo largo de la costa del Puño del Armín y finalmente al archipiélago del Ülsadar donde han desarrollado una floreciente cultura propia que mezcla muchos aspectos ya conocidos en los enanos Galenos y del Conglomerado, pero con adaptaciones particulares.
Lo que sí aparece como enseña de identidad propia es la cultura naval y la vinculación con el siempre peligroso océano. Aunque no son los únicos exponentes raciales de esta sub-rama, Rurkos y Yulos sí son su epítome representativo. Los Yulos pasan por ser los mejores marineros conocidos. Nadie, de ninguna raza, supera sus habilidades en el mar ni su pericia en la construcción de navios rápidos y maniobrables. (este punto también los ha convertido en los piratas más eficientes). Los Rurkos, por su parte, son famosos por sus Dragones y su polvo de fuego; esto es, la artillería basada en carga explosiva: cañones, desde las vara tronadoras (artillería de mano) a los dragones pesados que montan en buques de guerra destinados a tal efecto: sus devastadores "Dragones Artillados". El secreto de su polvo de fuego, o polvo de Dragón no ha podido ser replicado y se ha intentado en numerosas ocasiones.
A nivel cultural presentan muchas similitudes con cualquier identidad aculturada por los Galenos, sin llegar a su mismo grado de desarrollo. Pero también hay en ellos muchas notas frecuentemente vistas en la mezcolanza del Conglomerado, así que resulta dificil hacer una única descripción global que los defina con claridad. Podríamos decir que su cultura es una versión hibridada de componentes locales únicos con pueblos del conglomerado con cierta aculturación previa de los Galenos.
Físicamente es donde aparece mucho más claro este origen probablemente central. Tienen pieles doradas, ligera oblicuidad en los ojos (rasgos ya presente en algunas tribus centrales del Conglomerado) y una ligerísima menor estatura y corpulencia al respecto de las medias generales de los enanos. Como cultura isleña que es, se mantienen por lo general lejos de las disputas continentales.
LA IMPORTANCIA DE SER ENANO
-La Hermandad Global-
El pueblo enano es especialmente fascinante en sus contradicciones. Es un pueblo que se define en la sedentarización pero que guarda en sus estructuras profundas huellas de su nomadismo. Es un pueblo representativo de la guerra, visceral, ardiente y combativo que rara vez se ha hecho la guerra sí mismo. Tienen fama de hoscos, broncos y testarudos, pero resultan la raza más abierta, tolerante e integradora de todas. Los enanos no evalúan a nadie por su color de piel, idioma, religión o sexo, sino por lo que hacen o dicen. Se dice de ellos que son aislacionistas, encerrados en su mundo y fronteras, pero resultan la raza mercader casi por definición y no hay una ruta caravanera sin presencia de enanos. Los enanos conectan el mundo. Tienen una rígida organización jerárquica, piramidal, de fuerte impronta marcial que sin embargo hace emerger todo el poder de la fila, de la comunidad, del pueblo. Para que sus Haraníes se sienten en los tronos deben de garantizarse el respeto, confianza y lealtad de toda la comunidad. No se puede gobernar a los enanos con la coacción, la mentira, la amenaza o la crueldad. Se les considera avariciosos pero jamás le han disputado recursos a nadie, nunca han tomado más de lo que necesitan. Son un pueblo tan curtido, tan hecho, tan sólido, que podría arrebatar lo que quisiera a quien quisiera... y no lo hace.
Pero lo más impresionante del pueblo enano es su sentido de la hermandad, la conciencia global y colectiva de que todos los enanos son, en esencia, familia. El respeto y cuidado de los suyos. Es un sentimiento fraguado por milenios de nomadismo, ya fuese ese su modo de vida, ya fuese porque se lanzaban a la búsqueda y exploración de nuevos lugares en peligroso y largos viajes sin buen final asegurado. Para alcanzar los fines, para sobrevivir en un contexto hostil y desesperado, el grupo necesita la cohesión interna y la cohesión se consigue con las cadenas de lealtades y respeto. Un enano (o cualquiera) es respetado en el mundo enano cuando trabaja en favor del grupo, cuando aporta seguridad y bienestar al grupo, ya que ello garantiza probabilidades de supervivencia. Ese respeto se extiende en una cadena de lealtad. B respeta a A, C respeta a B, luego C respeta a A porque B respeta a A, y así sucesivamente. Ganarse el respeto de un enano es probablemente ganarse el respeto de cualquier enano cercano a él y a la mayor parte de los enanos cercanos a esos otros. Insultar, violentar o agredir a un enano, extenderá el agravio a toda la comunidad, a todo enano en las proximidades. Responderán en bloque, para bien o para mal.
Para construirse, el enano ha decidido no combatir al semejante, se ha apoyado en él. No lo ha visto como un oponente, sino como un aliado. Entiende que el colectivo siempre es más capaz que el individuo. Por eso, jamás ha buscado la unificación territorial, la idea de imperio, como otras razas. Ellos, en su diversidad están más unidos que elfos o humanos juntos. Ya son un imperio y nadie parece haberse dado cuenta. Si ves una barba, ves a un hermano. No hay mejor definición para los enanos.